Si vemos el Génesis, vemos el orden operativo del Creador.
Primero, por la acción de la palabra creó los " cielos y la tierra", y aunque no lo dice, lo podemos inferir viendo como continúa la acción creadora.
*[[Gn 1:3]] RV1960 Reina Valera 1960* Y dijo Dios: Sea la luz; y fue la luz.
Aquí " sea "significa, "empezá a existir"; es decir que, hasta ese momento no había luz; es más, ni siquiera existían el sol y las estrellas. Y es por eso que aún no se podía crear el sol, antes debía existir " luz ". Y esto es de una lógica feroz; sin luz no podría existir una lámpara; y menos lo podría algún lucero cósmico.
Así obra el Evangelio. Antes de poder hablarle del Amor de Dios a alguien, primero debería existir.
Si seguimos los métodos creativos de El Shadai, la existencia, la posibilidad del ser, sería por intermedio de una palabra.
Entendamos que la condición humana previa al arrepentimiento es la de estar.muertos en nuestros delitos y pecados ( la no existencia, un sol que no puede ser sin la creación de la luz). Curiosamente la locura del Evangelio trata del poder del mensaje, que al oirlo, trae a existencia una fe, y esta, moviliza al Espíritu que convence de pecado, justicia y juicio. Y es sabido que sin esto, sin esta "luz", no se puede nacer de nuevo, no empezaría la existencia de una nueva creación. Por eso, no se puede relacionar un Creador con su creación, como el sol, sin antes haber creado los fundamentos de su función existencial, como la luz.
Así es en el caso de la cautividad, las prisiones, y la iniquidad. Sin la palabra creadora de la buena noticia, no se crearía fe y convicción. Y sin esto no existirían posibilidades de los beneficios de la gracia.
No quieras ser creador de un nuevo método, desde el Génesis hasta el Apocalipsis primero la luz y la verdad, y recién ahí salvación y libertad.
Llamemos primeramente a los " Lázaros", y recién dediquémonos a desatarlos. Ojo con andar desatando " muertos".
No hay comentarios.:
Publicar un comentario